Este domingo he vuelto a repetir con lo de ir al Playazo, pero durante un buen rato no había quien entrara en el agua, entre la nata y todas las basuras que flotan no hay quien se bañe sin fruncir el ceño en señal de repugnancia. A ver que recuerde faltaba una paellera flotando porque había plumas como de siete pollos, una caja de gambas, vacía claro está, un escobón, condones, salva slips… lo peor de esto es que es raro el día que no te encuentras algo así.
El ayuntamiento debería de tomar medidas serías contra esto ya y no olvidar que vivimos de las playas y hay que dar imagen, pero que también los nerjeños merecemos respeto, sanidad y calidad en la playa, sea la que sea.
Silvia Pérez.